viernes, 29 de abril de 2016

LXIII

Yo podría quererte más que lo que te quiero
y podría también ser más bueno que lo que soy

Podría ser más alto si usara otros zapatos
y podría tener menos penas para desconsolarte

Pero sabés
(creo que sabés)
que la brizna de amor que te regalo
y el granito de bondad que te doy cada noche
y el metro setenta y pico que te abraza
y la pena chiquita que te desvela
no tienen más nombres que el tuyo

Y esas pequeñeces impropias
tan de vos que estremecen
son las que me dan un nombre

Te gusta ese tango que dice que estás clavada en mí
Debería serte fácil entender lo que me pasa
lo que nos somos

miércoles, 20 de abril de 2016

LXII

Deben pagar su infamia los que temen los sueños
Los que se arropan en los llantos tenues de sus niños
para escapar de la tempestad de la vida

Una Madre vale más que una cita
y un compañero vale más que el llanto solitario del torpe


Quien tenga mareas para revolver la mugre del abandono
o furias desatadas que ignoren las paz imbécil de la casa propia
que venga a refugiar su amor en mi dolor

Pero

quien crea que es más bello mirarse en el reflejo de una ventana
plácidamente arrullado por sus mujercitas bobas
que se abstenga de mí

Hoy es necesario desatender sirenas
En mares crespos los que reman viven
y los que añoran mueren

No hay mucho secreto

lunes, 18 de abril de 2016

LXI

Si el minuto de vida que le doy al tiempo se vuelve pájaro
que sea por vos

Vuelvo cada día a mi nido de lluvias
y te veo tan suave
tan llena de lirios en la lengua
tan perfumada de atardeceres
que pienso cada vez si no será ingrato estar triste

Tu enojo es más mío que yo
y tu piel de damasco está demasiado vacía

Dame un rato
un ínfimo segundo para dejar de mirar al costado
y te juro
te prometo
que voy a hacer de tu pena un paraíso violeta

El amor está cerca de tu espalda de nube
y ya estoy al borde de entenderte
Me falta sólo el beso de esta noche

lunes, 4 de abril de 2016

LX

Dos besos en tu cuello fueron el precio de nada
y pensé que te hice reina de mares y de cielos
Por nada

Quise alguna vez suponer que tu piel
aun derogada de luces y fotografías
valdría algo en mi océano de sueños
Pero no

Puede más el pasado que mis inconsistencias torpes
que mis torpezas inconsistentes

Todo
Todo puede más que yo

No hay nada que hacer entonces
Tus lunas brillan demasiado en mi cielo inconfesable
y tal vez
haya que dejar que encuentren universos más bellos

Yo
(y digo la palabra Yo porque te amo demasiado)
veré cómo me pinto en mares menos turbios

La muerte está siempre cerca
Pero no es posible caminar hacia ella sin heridas